Lo que me resta:
“Envía tu luz y tu verdad; éstas me guiarán; me conducirán a
tu santo monte, y a tus moradas. Entraré al altar de Dios, al Dios de mi
alegría y de mi gozo; y te alabaré con arpa, oh Dios, Dios mío“. Salmos 43:3-4.
Pasamos la vida caminando, y en un momento X nos damos cuenta que no hemos crecido, que tal vez al contrario bajamos escalones del éxito. Pero en un punto del tu vida entraste a alguien o algo que solo hizo que tu crecimiento se detuviera, eso puede ser un amigo, un novio, aveces las misma familia, las drogas, el alcohol, la pornografía, etc. Estas nos cosas que nos alejan de nuestra meta, nos distraen del camino.
Imagina que tienes una cita en el dentista a las 10 A.M. pero te detienes a ver tiendas, ropa, ya cuando te das cuenta son las 12 p.m. Así nos pasa con estas cosas, nos detenemos con estas cosas y eso hace que el fracaso este más cerca que el éxito.
Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio,
fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades,
pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios,
borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os
amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no
heredarán el reino de Dios.” Gálatas 5: 19 - 21
¿Qué puedo hace con esa persona o ese algo que me aleja hasta del mismo propósito de Dios? Ora. Si es algo aléjate de ese algo que ha hecho que tu retrocedas y si es alguien ora a Dios para que sea Dios quien te diga que quiere que hagas con esa amistad o relación de noviazgo. Diras: Y si no escucho la voz de Dios, como puedo saber que es de Dios?, lo sentirás, veras como poco a poco te alejas de esa persona sin alguna razón, solo la relación se va apagando, tu mismo sentirás alejarte de el o ella.
Cuando estas cosas entran a tu vida, te vas alejando poco a poco de Dios, y cuando llegas a abrir los ojos ya estas muy lejos de el. Pero recuerda que El solo esta a la distancia de una oración.
“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en
mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis
hacer”. Juan 15:5

No hay comentarios:
Publicar un comentario